Carta De La Editora Edición Nro. 47

Sin querer ya estamos a mitad de años, increíble pero el 2015 está pasando volando…

Esta edición tiene dos protagonistas… dos mujeres destacadas de Guatemala…

la primera Lourdes Morataya, una luchadora que está atravesando un momento duro, luchando con un cáncer invasivo en su pecho, pero ella ha decidido hacer de su lucha una campaña que de ánimo a otras personas. Su fortaleza edifica a quien la observa como un espectador distante, además nunca ha dejado su labor en la Fundación Dar… Estoy segura que leer su entrevista te traerá una nueva perspectiva a tus problemas, y además te ofrece la oportunidad de colaborar en su proyecto, como una inversión a la niñez Guatemalteca, ya sea con libros de cuentos o con un donativo, de cualquier forma un aporte invaluable al desarrollo de un niño lleno de ilusiones, sueños y un futuro por delante.

La otra protagonista una mujer que atrae por su belleza, carisma e inteligencia. Ana Lucía Mazariegos, ilumina la pantalla de canal Antigua, con su sonrisa, lo que muestra en la pantalla es el reflejo de lo que ocurre detrás de bambalinas. Promotora de la mujer Guatemalteca a través de su programa InfoMujer, presentadora del noticiero y además tiene una empresa de relaciones publicas y consultoría. Definitivamente la regla se vuelve a cumplir como en todas nuestras portadas, una mujer que hace muchas cosas pero que su valor radica en quien ella es y no en lo que hace.

Es que en realidad hay una delgada línea entre confundir nuestro valor como mujeres. Muchas confundimos que lo que hacemos determina si somos valiosas, y también lo que los demás opinan de nosotras. Si hacemos muchas cosas, somos “valiosas”, “valemos la pena” “somos productivas” y si no trabajamos fuera del hogar entonces no hacemos “nada” o “nada productivo”. Una verdadera mujer valiosa sabe que su valor radica en quien es… una hija de Dios primero, segundo una mujer llena de sueños e ilusiones, también una esposa y una madre. Dueña de un reino propio, donde desarrolla los agentes del futuro que cambiaran a este paìs.

O una mujer que trabaja fuera del hogar, a veces es difícil no medirse según el éxito en metas alcanzadas, o la remuneración económica. A veces es inevitable perderse en comparaciones, y sentir que nuestros esfuerzos son en vano. Ahí justamente es donde tenemos que recordar que nuestro valor no se mide por el HACER sino por el SER. Sólo una mujer de corazón sano y lleno de gozo, puede ser feliz, a pesar de las circunstancias que vive, como Lourdes, o brillar con luz propia, y ser promotora de los logros de otros sin sentirse amenazada como lo hace Ana Lucía.

Este revista pretende a través de sus artículos y redes sociales promover que nunca olvides cada día de ser tu mejor versión, de adentro hacia afuera; y que una vez que lo logres en tu vida, seas camino para que otras también lo alcancen.

Nos vemos en una próxima edición, que también vendrá cargada de muchísimas buenas noticias y herramientas…

Su amiga,

Maqui de Debroy.