Conocer al autor (God’s Story, La historia de Dios)

Muchas personas de hoy tienen el conocimiento de que Dios está “por ahí arriba, en algún lugar”. Hasta puede resultarles familiar su nombre, y pueden saber que es famoso, importante y poderoso… ¡pero no tienen la menor idea de quién es en realidad! La Biblia es la historia de Dios, y la mejor forma de descubrir el autor de la Biblia y de nuestra vida es leer su historia.

La historia de Dios revela su divina persona eterna, un infinito poder, su amor ilimitado, y su gloria inmaculada que da sentido a tu vida, gozo a tu corazón y propósito a tus pasos. la Biblia revela al Dios de gloria cuya presencia misma puede dar plenitud a lo vacío… sanidad a los quebrantados… perdón a los pecados… libertad a los amargados… propósito a los carentes de sentidos… ayuda a los indefensos… valor a los temerosos… fuerzas a los débiles… realidad a los religiosos… esperanza a los desesperados… y amor a los desprovistos de amor.

Aunque la historia de Dios no da explicación ni definición alguna de Dios, la declaración abierta de Génesis deja claro que, como Creador, es eterno y, por tanto, no está limitado por el tiempo. Dios creó el tiempo, pero no está sujeto a él ni este lo limita. La eternidad divina puede significar un maravilloso consuelo frente a algo tan definitivo y terrible como la muerte. Cuando alguien que pertenece a Cristo muere, esa persona es llevada a la presencia de Cristo en la eternidad y entra en un estado atemporal. Dios trasciende el tiempo. Para él, toda la historia -pasado, presente y futuro- es ahora. Lo ve todo de una vez. No te ve ahora, y espera treinta años para verte entonces. Ve toda tu vida de principio a fin en un momento.

Así como Dios no está sujeto por el tiempo, tampoco lo está por el espacio. Dios puede estar en todas partes a la vez.

Dios es mayor que su creación. No hay nada en tu vida -ninguna circunstancia o crisis, organización o administración, individuo o alianza, problema o presión, hábito o quebranto de corazón, enfermedad o dolor, rey o criminal, nada visible o invisible- ¡nada que sea mayor que Dios! Él es Creador que tiene autoridad sobre todo, es plenamente capaz de controlar todo aquello que no solo parece, sino que está más allá de nuestras capacidades de manejo.

Dios también es aparte de la creación. Esto significa que cuando algo va mal, puede arreglarlo. Cuando algo se rompe, puede repararlo. Cuando algo se pierde, puede encontrarlo. Cuando algo no funciona, puede restaurarlo. Cuando algo duele, puede sanarlo. Cuando alguien está muerto, ¡puede resucitarlo! Nuestros fracasos, pecados, errores, y defectos no se diluyen ni merman, ni se debilitan ¡ni perjudican a Dios!

Dios está activo como Creador. Está activo en lo grande…. y en lo pequeño. Entiende tu gran decisión… tu gran compromiso… tu gran problema. Nota tu pequeña lágrima… tu pequeña bondad… tu pequeño sentimiento de dolor, Dios está activo de formas, invisibles e incipiente. Aunque no percibamos que está manos a la obra, está activamente presente e involucrado. Toma la iniciativa en la creación y en nuestra vida. Tu vida y la mía, tanto física como espiritual, dependen de la iniciativa de Dios.

Dios es personal y amoroso. Ama a todos los que estamos en este mundo y podemos llamarlo Padre, cuando nos acercamos en él en una relación personal por medio de la fe en su hijo. La gloria de Dios Padre se hace visible y accesible a nosotros a través de Dios Hijo, Jesús. Y la gloria de Dios Hijo se hace real y accesible a nosotros por medio de Dios Espíritu Santo.

Para tener un sentido real, duradero y profundo de la vida… conoce a Dios.

Para conocer a Dios… lee la historia de Dios.