Transformadas por el fuego de la aflicción
- Maqui de Debroy
- 3 oct 2015
- 2 Min. de lectura
“También nos alegramos al enfrentar pruebas y dificultades porque sabemos que nos ayudan a desarrollar resistencia. Y la resistencia desarrolla firmeza de carácter. Y el carácter fortalece nuestra esperanza segura de salvación”. (Romanos 5:3, 4 NTV) “Cuando un minero busca oro y detecta una veta azul sobre la roca, empieza a romper la piedra justo allí, la extrae y la pone en el fuego porque a esa piedra hay que pasarla siete veces por las llamas. En la primera pasada obtiene laca, en la segunda plomo, recién en la sexta sale plata pero lo único que el minero busca es oro, y es por eso que la sigue pasando por el fuego, porque esa perseverancia hace aparecer un elemento más valioso, más caro”. Alejandra Stamateas.

Muchas veces Dios hace de “minero” en nuestras vidas y para sacar lo mejor de nosotras, debe pasarnos por el fuego de las aflicciones, de las dificultades. Allí en el dolor que provocan las llamas, quema muchas veces el orgullo, la inmadurez, la impaciencia. También a través de largos desiertos, nos libera de malas amistades, relaciones que nos agotan. Quita personas, actividades y cosas de nuestra vida. La resistencia al fuego desarrolla firmeza de carácter y el carácter fortalece nuestra esperanza. “¡Pero considera la alegría de aquellos a quienes Dios corrige! Cuando peques, no menosprecies la disciplina del Todopoderoso. Pues aunque él hiere, también venda las heridas; él golpea, pero sus manos también sanan”. (Job 5:17, 18 NTV)

Cuando Dios te pase por el fuego, recuerda que saca ese oro escondido en ti. No te entristezcas sino recuerda que Dios, tu Padre Celestial, siempre corrige para tu propio bienestar, te guía hacia una posición de mayor madurez, sabiduría y gozo.
Comments